Con la presencia de la directora ejecutiva de la Fundación Artesanías de Chile, Dalia Haymann y a la coordinadora del Programa Proempleo del Ministerio del Trabajo, Macarena Donoso, fueron certificadas un total de 50 artesanas aymaras, quienes durante dos meses se capacitaron con el fin de hacer de su oficio un empleo sustentable en el tiempo para el bienestar de ellas y sus respectivas familia.
La capacitación se enmarca en el Programa de Mejora a la empleabilidad para artesanos y artesanas tradicionales de zonas rurales, que ambas entidades implementaron en la Región de Tarapacá y que para Angélica Mamani (24), una de las mujeres aymaras beneficiadas con este proyecto, significó un trabajo provechoso que rescató lo mejor de cada una, “aprendimos algo más en la vida, pero lo más importante es que debemos como jóvenes sentir orgullo por nuestra cultura, nuestro trabajo, nuestra lengua y ritos. Los invito a seguir traspasando este oficio a nuestros hijos”.
Fortalecer el oficio artesanal para fomentar la asociatividad entre las artesanas y entregar competencias para la empleabilidad en áreas como cálculo de costos y control de calidad, fue el trabajo que llevó a cabo Fundación Artesanías de Chile con artesanas que trabajan el oficio textil en Alto Hospicio y Pozo Almonte.
Este proyecto se inicia el año 2012, cuando la Fundación desarrolló el Plan Norte, dando énfasis a las regiones del norte del país, visitando la región de Tarapacá en alianza con la Gobernación del Tamarugal, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA) Regional, Servicio País y la Municipalidad de Pozo Almonte entre otros. En estas visitas se actualizaron las bases de datos e ingresaron nuevas agrupaciones a la red de artesanos de la Fundación, constatando que tienen habilidad comercial, técnica y capacidad de productividad, faltándoles modalidades para llegar a los canales comerciales.
“Las problemáticas desde la óptica de la Fundación de las artesanas en ambas comunas son transversales. Lo que más se destaca son problemas para poner valor a sus productos y el tema de la asociatividad. Tienen muchos conflictos internos, lo que puede ser común en asociaciones de artesanos, pero tratamos de explicarles que existen las herramientas para solucionar estos problemas”, asegura la encargada del proyecto para artesanos y artesanas de la zona norte del país, Vania Araníbar.
Para Orielle Mamani, en tanto, artesana de Colchane estas capacitaciones la ayudaron a ampliar su conocimiento y a valorar su trabajo, rescatando también la importancia de traspasar este arte a sus hijos.
El curso de cálculo de costos es de gran importancia, pues se logrará homologar los precios de los productos en la zona, lo que ha hecho Fundación Artesanías de Chile de forma transversal con todos los artesanos beneficiados con este proyecto de norte a sur, que tiene que ver con la transparencia y forma de trabajo de la Fundación hacia sus artesanos.
En la ceremonia las artesanas bailaron cueca nortina, caracterizada por su valseado y música instrumental, y Sicuri, danza andina originaria de las comunidades de los Mollos, Aymaras y Lipis.
Durante los próximos meses seguirá un proceso de intermediación, donde Fundación Artesanías de Chile acompañará a las artesanas a insertarse en canales comerciales concretos.